L.A. rompe las etiquetas de lo alternativo en “KING OF BEASTS”

Con el bagaje y los conocimientos técnicos adquiridos en todo ese tiempo, L.A. regresa con King of beasts, su quinto álbum de estudio y segundo con Sony Music, un trabajo creado para traspasar las fronteras de los estilos convencionales, ubicado en un territorio apto para oídos más diversos. Cuando se consigue sin perder un ápice de identidad, como es el caso, la ecuación es sencillamente perfecta. Luis A.Segura estará firmando este nuevo disco el 4 de mayo en su Mallorca natal (El Corte Inglés de Alexandre Roselló).

L.A. suena en King of beasts a cruce de estilos, ahora que Segura ha tomado las riendas en este primer trabajo autoproducido, con la colaboración, eso sí, de Toni Noguera, su principal y casi único cómplice en el estudio de grabación. Asumió la responsabilidad, calculó el riesgo y completó un álbum transgresor y al mismo tiempo amable, un disco en el que Pearl Jam puede convivir en perfecta armonía con Alicia Keys.

Hay funk en King of beasts, y soul, y por supuesto rock. Hay momentos acústicos y otros de distorsión. Hay palmas y guitarras. Y todo ello en unas canciones conducidas al extremo por el propio Luis A. Segura. “Las he llevado a un país adonde no había ido nunca”, confiesa. Quizás precisamente por su variedad, un país también donde habita un público más abierto de oídos, menos militante en el rock americano de sus anteriores trabajos.

Abundan los estribillos incluso “muy comerciales”, en las propias palabras de Segura. Lo es el de Leave it all behind el segundo tema que dio a conocer de este quinto álbum, una canción envolvente y misteriosa, y lo es también el de Helsinki, la siguiente en ser liberada, en este caso vibrante y contagiosa. “Es algo que yo ya había experimentado, pero a lo que ahora me lanzo de cabeza” sin miedo.

Leave it all behind, Helsinki, Turn the lights on y Suddenly…  Son los extremos, tan distintos pero tan cautivadores, en los que se mueve King of beasts, un disco llamado a ampliar el círculo de los seguidores por L.A. entre un público más convencional.